Son muchos los signos que contiene la lengua española. De todos ellos, uno de los peor utilizados es el de la raya (—) o guion largo. El motivo principal es que el signo de la raya no se encuentra en los teclados, por ello existe cierta tendencia a sustituirla, erróneamente, por el guion corto (-).
Para que tus libros autopublicados resulten profesionales, debes tener claro que la raya y el guion corto son signos de puntuación diferentes con aplicaciones distintas.
La raya o guion largo es un signo de puntuación que consiste en una raya horizontal (—). Tiene varios usos, entre los que se encuentra el de las acotaciones en los diálogos, que es el que vamos a ver en esta entrada.
Índice de contenidos
El guion y la raya
El guion corto y la raya son signos que tienden a confundirse, y la ocultación de esta última en los teclados no ayuda a deshacer el error.
El uso del guion
Visualmente, el guion corto (-) es mucho más estrecho que la raya (—), y se utiliza en tres casos:
- Como signo de unión entre palabras u otros signos.
El trasvase Tajo-Segura
- Como signo de división de palabras a final de línea.
- Para marcar la separación entre las sílabas que componen una palabra en obras de contenido lingüístico.
Es-drú-ju-la
El uso de la raya
La raya se utiliza en los siguientes casos:
- Para acotar aclaraciones o incisos.
- Para introducir una nueva aclaración o inciso en un texto que ya está acotado por paréntesis.
- Para señalar la intervención de los interlocutores en las reproducciones de los diálogos.
- Para señalar los comentarios del narrador en las intervenciones de los personajes.
- Para enmarcar los comentarios del transcriptor de una cita textual.
- Para introducir los elementos de una relación que se encuentran separados por líneas.
- Para indicar la omisión de un elemento que no se quiere repetir en los renglones de las listas alfabéticas e índices bibliográficos.
La raya en los diálogos
Para escribir los diálogos en formato latino debes utilizar siempre la raya (—).
Cómo hacer la raya de diálogo con el teclado
La raya no está en el teclado del ordenador ni tiene un acceso directo. Para utilizarla tienes varias posibilidades:
Cómo hacer la raya en un PC
Para escribir la raya o guion largo desde Word en un PC tienes varias opciones:
- Ve a menú Insertar > Símbolo > Más símbolos… > Caracteres especiales y selecciona la raya (—).
- Pulsa la tecla Alt y, sin soltarla, escribe 0151 y suelta la tecla Alt.
- Con el atajo Alt Gr + el signo menos (-) del teclado numérico.
- Pulsando Control + Alt + signo menos (-).
Cómo hacer la raya en un MAC
Para escribir la raya o guion largo desde el editor de texto de un Mac, pulsa las teclas mayúsculas + opción (alt.) + guion (-).
Y si no quieres utilizar estas combinaciones cada vez que tengas que escribir el signo de la raya, siempre puedes usar el guion corto y despues, cuando vayas a realizar la corrección ortotipográfica, sustituyes el guion corto por la raya con la herramienta de «Buscar y reemplazar».
Ejemplos del uso de la raya en los diálogos
Vamos a ver algunos de los casos con los que nos podemos encontrar en los diálogos que necesitan el uso de la raya.
- Como norma general, se coloca una raya pegada al texto al comienzo de la intervención. Cada diálogo se escribe en una línea independiente:
—Todo eso que dices suena muy bien, pero tengo mucho trabajo.
—Trabajo te voy a dar yo cuando te coja.
- Se escribirá solo con la raya de comienzo cuando la acotación cierre el comentario:
—Diles que se vayan, por favor —contesté.
- Si dentro del comentario queremos realizar una acotación, se escribirá entre rayas. Y si la acotación se introduce a través de un verbo dicendi o del habla (dijo, contestó, exclamó, añadió, preguntó…) se iniciará siempre con minúscula, independientemente de que venga precedido de un signo ortográfico con características de punto:
—¡Cuánta gentuza! —exclamó indignado el delegado de asuntos sociales.
- Si el comentario continúa después de la acotación del narrador, el signo de puntuación se coloca después de la raya:
—¡Cuánta gentuza! —exclamó indignado el delegado de asuntos sociales—. Que los saquen a todos de aquí.
- Si el comentario va precedido de una exclamación, una interrogación o puntos suspensivos, estos se colocan antes de la raya:
—¡Han llegado sus vecinos! —me dijo Julia—. Son bastante atentos.
—Han llegado sus vecinos… —me dijo Julia—. Son bastante atentos.
- Si el comentario va precedido de punto, coma, punto y coma o dos puntos, estos se ponen después de la raya de cierre.
—Han llegado sus vecinos —me dijo Julia—. Son bastante atentos.
—Han llegado sus vecinos —me dijo Julia—, ya no podemos subir.
—Han llegado sus vecinos —dijo Julia, y añadió—: son bastante atentos.
- Cuando la acotación del narrador no contenga ningún verbo dicendi o de habla, la intervención del personaje se cerrará con un punto. Y si el personaje continúa hablando el punto se volverá a poner después del comentario del narrador y se iniciará con letra mayúscula.
—Han llegado sus vecinos. —Saltó de la silla.
—Debo hacer algo. —Descolgó el teléfono y marco.
—Han llegado sus vecinos. —Saltó de la silla—. Son bastante atentos.
—Debo hacer algo. —Descolgó el teléfono y marco—. Que venga la policía.
- Para terminar, un último apunte concerniente a los diálogos: existe la posibilidad de que el diálogo de uno de los personajes sea tan largo que necesite de puntos y aparte dentro de su discurso. En ese caso, utilizaremos las comillas latinas (») pegadas al principio del párrafo para indicar que continúa la intervención de dicho personaje y no confundirla con la de su interlocutor.
—De eso nada, Virginia —le dije a mi jefa—, ni se te ocurra. ¿No sabes que la competencia ha invertido la mitad del presupuesto en promocionarse en las redes sociales?
»Habría que mejorar el marketing de contenidos. No creo que podamos afrontar la campaña navideña sin no dedicamos más dinero a promocionar nuestros artículos. Sería una catastrofe descomunal.
—De acuerdo, Vicente —me contestó ella—, incrementaremos la partida publicitaria.
Pues eso ha sido todo. Espero que te haya quedado claro cómo insertar la raya y que nunca utilices el guion corto en los diálogos.
Es muy importante que tus libros autopublicados denoten profesionalidad y no incurran en este tipo de errores amateur, podrían ocasionarte la perdida de lectores y el incremento de malas críticas.
Si quieres saber cómo solucionar otros errores ortotipográficos frecuentes, visita la entrada Qué es la corrección ortotipográfica y cuánto cuesta. Y si quieres que alguien te corrija tus escritos, puedes contactar conmigo a través de la página de servicios editoriales para publicar libros.
Y tú, ¿cómo haces para introducir la raya en los diálogos?